El adiós de Podemos al Gobierno
Análisis
Los morados se quedan sin ministerios tras el fracaso de la negociación con Sumar
El veto a la entrada de Irene Montero en el futuro Gobierno de España ha provocado una nueva crisis entre Podemos y Sumar. La formación que dirige Ione Belarra ha rechazado la propuesta de sus socios de coalición, que ofrecían a Nacho Álvarez, actual secretario de Estado de Derechos Sociales y miembro de la ejecutiva de Podemos, como nuevo ministro del Gobierno, representando a Podemos.
La negativa de la formación morada se debe a que mantuvieron su posición respecto a la continuidad de Irene Montero como ministra de Igualdad, mientras que Yolanda Díaz, lideresa de la plataforma Sumar, con la que Podemos concurrió a las pasadas elecciones, se niega a que Montero continúe cuatro años más en el ejecutivo nacional.
Esta enésima discrepancia entre ambas figuras de la izquierda ha abierto una nueva crisis, que ha dejado sin representación gubernamental a los miembros de Podemos.
![]() |
Flickr: Podemos |
Las consecuencias del veto a Montero
La primera consecuencia directa de esta crisis ha sido el abandono del Gobierno por parte de Podemos. Esta circunstancia ha provocado una pérdida de influencia para la formación morada en favor de Yolanda Díaz, que ha logrado nombrar a ministros más afines a su liderazgo, así como la pérdida de altavoz mediático de Podemos, principal rival político a la izquierda del PSOE.
En segundo lugar, habrá que ver hasta donde llega la crisis entre Podemos y Sumar para analizar los posibles efectos a largo plazo. Esta guerra puede desenlazar en un choque de trenes entre ambas formaciones, donde las dos pueden salir muy malparadas.
![]() |
Flickr PSOE |
A simple vista, podría parecer que el partido que tiene el futuro más oscuro es Podemos. Los morados únicamente cuentan con cinco diputados en el Congreso y han perdido su cuota gubernamental, con todo lo que implica para su visibilidad como marca. Ahora bien, en varias ocasiones Ione Belarra ha manifestado su autonomía dentro de la coalición, lo cual comporta que en un hipotético desmarque de la línea ideológica de Sumar, Podemos con sus cinco parlamentarios tiene una vía de presión para reivindicar sus demandas, poniendo en apuros a sus socios de coalición y al PSOE, que deberán negociar directamente con ellos para tramitar cualquier tipo de avance legislativo.
No obstante, los morados deben tener cuidado a la hora de calcular el nivel de sometimiento al que van a llevar a sus socios de coalición, dado que en caso de una futura ruptura del pacto de coalición con Sumar perderían el 23% de asignación económica, que firmaron en el acuerdo para concurrir con dicha formación a las elecciones.
En el caso de Sumar, esta decisión es un paso más en su intento de condenar a Podemos a la irrelevancia política para tratar de absorber a su masa de votantes. Asimismo, que los morados no tengan ministerios supone la reducción del conflicto entre las formaciones que integran la plataforma. Cabe recordar que el ejecutivo estará formado por dos partidos, pero que dentro de la plataforma Sumar, existen varias formaciones que la integran y demandan cuotas de poder.
![]() |
Flickr PSOE |
Por otro lado, a Sumar tampoco le conviene ahogar en exceso a Podemos porque puede comportarle consecuencias negativas en un futuro electoral, más allá de las propias pugnas internas que debilitan la imagen de la plataforma.
Conviene anotar que en junio de 2024 hay elecciones europeas y existe el rumor de que Podemos pueda concurrir sin Sumar a estos comicios, según apuntan algunos medios españoles. Este hecho no es para nada menor y puede suponer un golpe importante para los partidos situados a la izquierda del PSOE. Cabe recordar, el fracaso de los morados y Sumar en los territorios donde se presentaron en solitario en las pasadas elecciones autonómicas, como por ejemplo en la Comunidad de Madrid, la Comunidad Valenciana, Baleares o Aragón.
En definitiva, a la espera de las dimensiones futuras de esta nueva crisis interna, lo que está confirmado es que Irene Montero, que en la recta final de la pasada legislatura estuvo en el punto de mira por impulsar la Ley del "solo sí es sí", que rebajó la condena a más de 1000 violadores, no continuará como ministra del Gobierno de España.
Mario Quero
Comentarios
Publicar un comentario